Estar consciente significa prestar atención deliberadamente al momento presente. Esto parece obvio, ¿no nos fijamos en lo que estamos haciendo, especialmente para comer? La respuesta es un sorprendente no. Por lo general, no prestamos atención deliberada, incluso al comer nuestros alimentos favoritos.
Brian Wansink, PhD., el autor de "Comer Inconsciente", investiga cómo prestar atención sólo ligeramente al hambre, la saciedad, y las señales de los alimentos conduce a una alimentación imprevista, comer en exceso y aumento de peso. En un estudio, el Dr. Wansink mostró que los estudiantes universitarios a la hora de decidir si estaban saciados prestaban más atención a lo lleno / vacío que estaba un tazón de sopa que al hambre actual. Sin saberlo ellos, la mitad de los estudiantes comió de un tazón que automáticamente se volvía a llenar por sí solo, por lo tanto, el nivel de la sopa nunca disminuía. Aquellos alumnos comieron considerablemente más que los estudiantes con un plato regular, anulando sus señales de hambre / saciedad, siguiendo a comer sin pensar basándose en la señal visual de que la comida estaba disponible. El Dr. Wansink llamó a esto "comer inconsciente", porque la gente tendía a comer basándose en una pequeña cantidad de información (como la señal visual de sopa en el tazón), en vez de la imagen completa incluyendo el hambre, el gusto, y otros factores.
Comer consciente está basado en toda la información sensorial disponible en el momento presente. Además, se trata de una elección consciente para comer alimentos nutritivos, con moderación, prestando atención a las sensaciones de hambre y satisfacción. La investigación ha demostrado que comer consciente apoya la pérdida de peso y el mantenimiento del peso adecuado. Es un hábito que anima a los niños a comer menos y dejar de comer cuando estén satisfechos, no atiborrados.
Comer consciente puede comenzar con una bendición o una oración que reconoce el don de la comida, la tierra que la proporcionó y las personas que la prepararon. Una bendición puede establecer la lentitud necesaria para una comida consciente.
Pida que los niños participen en preparación y presentación de la comida; prestar atención a estos detalles aumenta su inversión en la comida.
Apague el televisor y otros dispositivos electrónicos que puedan distraer de la experiencia de comer. Comer consciente tiene lugar cuando la gente participa sólo en la comida y la conversación durante las comidas.
Baje los utensilios entre bocado y bocado, mastique bien y trague deliberadamente. Asegúrese de que los niños resistan a la tentación de ponerse más comida en la boca antes de tragar. La sobrecarga lleva a comer en exceso.
A medida que está comiendo, identifique y hable de los sabores de los alimentos (hierbas, especias, otros sabores), y enséñeles a los niños a prestar atención a los aromas y texturas de los alimentos.
Comer consciente puede reducir la tendencia a comer en exceso. Cuando la gente come poco a poco se le da tiempo a las hormonas que estimulan la saciedad a llegar desde el estómago hasta el cerebro. Recibir la señal de la hormona ayuda a las personas a dejar de comer antes de que estén atiborrados. Los padres pueden ayudar a los niños a comer conscientemente cuando reducen las distracciones a la hora de comer, fomentan un ritmo más lento de comer, y aumentan la atención prestada a texturas y sabores.
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